Médula, además de ser la parte interior de las plantas, representa un momento, pero sobre todo, una actitud. Es algo muy personal que significa el inicio de una nueva etapa. Es ser uno mismo, sin tapujos, sin complejos, sin nada que ocultar. Solo así se consigue crear una marca única y diferente. Una marca auténtica con espíritu luchador y un poco gamberro, que nace con el objetivo de hacerse un hueco en el mercado de las flores. Un claro ejemplo de química agencia-cliente, y que de una relación de trabajo se puede construir el mejor equipo de trabajo.